Reclinó la cabeza hacia atrás. Las emociones vividas le habían agotado. Frente a él Lorraine le observaba y no sabía cómo consolarlo. Aún quedaba por cubrir un expediente , probablemente el más difícil: comunicar a Maxwell las últimas noticias. Pero había que hacerlo, tenía que hacerlo. Era tarde, pero no importaba; ante la trascendencia de lo que debía decirle, estaba seguro que no le importaría la hora que fuese. Bebió un sorbo de whisky y marcó el número de su hermano.
- ¿ Quién llama a estas horas? - fue lo que escuchó como saludo
- Maxwell, soy yo, Thomas
- ¡ Hermano ! ¿ Ocurre algo ? No sueles llamarme a estas horas ¿ Papá o mamá?
- No, no. Ellos están bien. Se trata de Perl
- ¿ De Perl ? Hace tiempo que no...
- Ha muerto - le interrumpió su hermano no pudiendo demorar más la noticia
- ¿ Cómo dices ?
- Lo que has oído. Hoy ha sido enterrada
No se escuchó nada al otro lado. Ningún ruido, ninguna exclamación, sólo silencio absoluto.
No lo podía creer: ella muerta. ¿Cómo ? ¿ Por qué ? ¿ Cuándo ? Y en una fracción de segundo, acudieron a su memoria instantes vividos con ella. Estaba llena de vida. Y la volvió a ver reír cuando él jugueteando le hacía cosquillas. Y sus besos apasionados y también la bronca que provocó que no volvieran a verse más. Si se hubieran cumplido sus planes, en este tiempo ya hubieran estado casados y quién sabe si encargando un hijo.
Volvió en sí, cuando a través del teléfono, escuchó la voz de Thomas que le llamaba. No podía responder, se había quedado sin voz, no reaccionaba. En ningún momento se había olvidado de ella y la imaginaba libre y feliz. Y sin embargo le decían que había sido enterrada en ese mismo día.
- Maxwell, Maxwell ¿ estás ahí ?
- Si, perdona, es que no tengo palabras. ¿ Cómo ha sido? ¿ Algún accidente?
- No. Es muy largo y complicado de explicar.Quizá en otro momento cuando ambos estemos más tranquilos. Yo tampoco termino de creérmelo.
- ¿ Crees que voy a tener paciencia a averiguar algo después de la noticia? Necesito saberlo todo. Dejaré todo dispuesto y a poder ser mañana mismo vuelo para allá. Pero mientras dime ¿ cómo ha muerto ?
- Hace algunos meses que nos vimos y estaba bien, aparentemente. La noticia la he sabido por medio de su abogado ayer... hoy... no sé exactamente cuando. Tengo la cabeza embotada e incapaz de pensar. Los días, las fechas se juntan , se acumulan.Te lo explicaré todo cuando llegues. Te adelanto que ha sido de cáncer
- ¿ De cáncer ?
- Si, un tumor en el vientre. Y ahora te pido por favor que no me hagas revivir todo lo que he vivido en a penas dos días. Me ha afectado mucho; la estimaba, a pesar de que casi no teníamos contacto. No se merecía ese final. Estoy muy impresionado.
- ¿ Crees que yo no lo estoy? Era el amor de mi vida. Mi viaje fue una huida para no estar cerca de ella. Si me hubiera quedado quizás...
- Maxwell, de nada sirve recriminarse lo pasado que no tiene solución, lo que sí te digo es que todo hubiera sido diferente. Hay muchas cosas que explicar, que en un principio yo tampoco entendía, hasta que lo supe por su abogado. Iremos a verle en cuanto llegues y entonces lo comprenderás todo.
El resto de la familia, estamos todos bien. Papá y mamá también. Bueno hermano, te dejo. Necesito tratar de dormir y relajarme.
- Gracias Thomas por todo lo que has hecho. Lo siento. ¡ Lo siento tanto ...!
Y no pudo seguir hablando porque un sollozo brotó de su garganta.
Dos días después los hermanos se abrazaban en el aeropuerto. Ninguno de los dos podía hablar. Permanecían abrazados, necesitaban ese calor familiar. Lorraine, les observaba también emocionada. Estaban viviendo momentos muy duros, que en lo referente a Maxwell, no habían hecho más que empezar.
Durante el trayecto desde el aeropuerto a casa de sus padres,los tres iban en silencio, sumidos en sus pensamientos. Maxwell recordando aquellas calles y por consiguiente, como fondo el rostro feliz y querido de Perl.
Thomas y Lorraine dando vueltas a cómo decirle el segundo tramo. La niña vivía en casa de la pareja, pero hoy, como una excepción, la dejaron al cuidado de los padres de Thomas..
Al dejar a la niña en casa de los abuelos, para ir en busca de Maxwell, se entabló una agria discusión entre Thomas y su madre. Sarah había discutido con ellos referente a Helen. Quería que Maxwell no supiera que era su hija, sino de Thomas y Lorraine, y esa fue la gota que colmó el vaso.
- ¿ Cómo crees que podemos hacer eso? ¡ Es su padre ! Ha perdido a la mujer que amaba y que le ha dado esta hija ¿ Crees que él no se dará cuenta? A veces creo que estás perdiendo el juicio. Sabrá la verdad por cruda y dura que sea, porque tiene ese derecho y no seré yo quién se lo arrebate. No se puede ir por la vida con tanto egoísmo. Eres mi madre, pero lo has hecho mal, muy mal desde el principio. Sobretodo con ellos dos, así que deja las cosas como están; además hay algo firmado ante un notario y hay que cumplir con ello, porque esa fue su voluntad y no le quitaremos eso también. Maxwell sabrá que Helen es su hija.
Y ahora, Lorraine, prepárate: nos vamos. Es tarde. Hemos de recoger a mi hermano en el aeropuerto.
Y salieron de casa de sus padres. Thomas refunfuñaba ante lo expuesto por su madre a lo que no daba crédito.
- ¡ Es increíble ! ¿ Qué la pasa? ¿ Cómo puede ser tan egoísta ? ¿ Cómo hasta ese extremo ? Sabrá la verdad, aunque perdamos la crianza de Helen, pero no a costa de robarle su hija. Jamás, ni hablar.
- Cálmate Thomas. En nada de tiempo, sabrá toda la verdad, tal cual es y tal como deseaba Perl. Tiene un derecho que nadie le puede quitar, ni siquiera tu madre. Y ahora, siquiera por un momento, tratemos de olvidarnos de todo ésto. Siquiera hasta mañana, porque recordarlo, lo haremos siempre.
A todos les costó recobrar el sueño aquella noche. Thomas y Lorraine revivían una y otra vez el entierro.Ella no se separaba de la cunita de la niña. La quería y temía el momento en que tuviera que separarse. Thomas inquieto se levantaba incapaz de conciliar el sueño.
Pero ¿ qué pasaba en casa de sus padres?
- ¿ Quién llama a estas horas? - fue lo que escuchó como saludo
- Maxwell, soy yo, Thomas
- ¡ Hermano ! ¿ Ocurre algo ? No sueles llamarme a estas horas ¿ Papá o mamá?
- No, no. Ellos están bien. Se trata de Perl
- ¿ De Perl ? Hace tiempo que no...
- Ha muerto - le interrumpió su hermano no pudiendo demorar más la noticia
- ¿ Cómo dices ?
- Lo que has oído. Hoy ha sido enterrada
No lo podía creer: ella muerta. ¿Cómo ? ¿ Por qué ? ¿ Cuándo ? Y en una fracción de segundo, acudieron a su memoria instantes vividos con ella. Estaba llena de vida. Y la volvió a ver reír cuando él jugueteando le hacía cosquillas. Y sus besos apasionados y también la bronca que provocó que no volvieran a verse más. Si se hubieran cumplido sus planes, en este tiempo ya hubieran estado casados y quién sabe si encargando un hijo.
Volvió en sí, cuando a través del teléfono, escuchó la voz de Thomas que le llamaba. No podía responder, se había quedado sin voz, no reaccionaba. En ningún momento se había olvidado de ella y la imaginaba libre y feliz. Y sin embargo le decían que había sido enterrada en ese mismo día.
- Maxwell, Maxwell ¿ estás ahí ?
- Si, perdona, es que no tengo palabras. ¿ Cómo ha sido? ¿ Algún accidente?
- No. Es muy largo y complicado de explicar.Quizá en otro momento cuando ambos estemos más tranquilos. Yo tampoco termino de creérmelo.
- ¿ Crees que voy a tener paciencia a averiguar algo después de la noticia? Necesito saberlo todo. Dejaré todo dispuesto y a poder ser mañana mismo vuelo para allá. Pero mientras dime ¿ cómo ha muerto ?
- Hace algunos meses que nos vimos y estaba bien, aparentemente. La noticia la he sabido por medio de su abogado ayer... hoy... no sé exactamente cuando. Tengo la cabeza embotada e incapaz de pensar. Los días, las fechas se juntan , se acumulan.Te lo explicaré todo cuando llegues. Te adelanto que ha sido de cáncer
- ¿ De cáncer ?
- Si, un tumor en el vientre. Y ahora te pido por favor que no me hagas revivir todo lo que he vivido en a penas dos días. Me ha afectado mucho; la estimaba, a pesar de que casi no teníamos contacto. No se merecía ese final. Estoy muy impresionado.
- ¿ Crees que yo no lo estoy? Era el amor de mi vida. Mi viaje fue una huida para no estar cerca de ella. Si me hubiera quedado quizás...
- Maxwell, de nada sirve recriminarse lo pasado que no tiene solución, lo que sí te digo es que todo hubiera sido diferente. Hay muchas cosas que explicar, que en un principio yo tampoco entendía, hasta que lo supe por su abogado. Iremos a verle en cuanto llegues y entonces lo comprenderás todo.
El resto de la familia, estamos todos bien. Papá y mamá también. Bueno hermano, te dejo. Necesito tratar de dormir y relajarme.
- Gracias Thomas por todo lo que has hecho. Lo siento. ¡ Lo siento tanto ...!
Y no pudo seguir hablando porque un sollozo brotó de su garganta.
Dos días después los hermanos se abrazaban en el aeropuerto. Ninguno de los dos podía hablar. Permanecían abrazados, necesitaban ese calor familiar. Lorraine, les observaba también emocionada. Estaban viviendo momentos muy duros, que en lo referente a Maxwell, no habían hecho más que empezar.
Durante el trayecto desde el aeropuerto a casa de sus padres,los tres iban en silencio, sumidos en sus pensamientos. Maxwell recordando aquellas calles y por consiguiente, como fondo el rostro feliz y querido de Perl.
Al dejar a la niña en casa de los abuelos, para ir en busca de Maxwell, se entabló una agria discusión entre Thomas y su madre. Sarah había discutido con ellos referente a Helen. Quería que Maxwell no supiera que era su hija, sino de Thomas y Lorraine, y esa fue la gota que colmó el vaso.
- ¿ Cómo crees que podemos hacer eso? ¡ Es su padre ! Ha perdido a la mujer que amaba y que le ha dado esta hija ¿ Crees que él no se dará cuenta? A veces creo que estás perdiendo el juicio. Sabrá la verdad por cruda y dura que sea, porque tiene ese derecho y no seré yo quién se lo arrebate. No se puede ir por la vida con tanto egoísmo. Eres mi madre, pero lo has hecho mal, muy mal desde el principio. Sobretodo con ellos dos, así que deja las cosas como están; además hay algo firmado ante un notario y hay que cumplir con ello, porque esa fue su voluntad y no le quitaremos eso también. Maxwell sabrá que Helen es su hija.
Y ahora, Lorraine, prepárate: nos vamos. Es tarde. Hemos de recoger a mi hermano en el aeropuerto.
Y salieron de casa de sus padres. Thomas refunfuñaba ante lo expuesto por su madre a lo que no daba crédito.
- ¡ Es increíble ! ¿ Qué la pasa? ¿ Cómo puede ser tan egoísta ? ¿ Cómo hasta ese extremo ? Sabrá la verdad, aunque perdamos la crianza de Helen, pero no a costa de robarle su hija. Jamás, ni hablar.
- Cálmate Thomas. En nada de tiempo, sabrá toda la verdad, tal cual es y tal como deseaba Perl. Tiene un derecho que nadie le puede quitar, ni siquiera tu madre. Y ahora, siquiera por un momento, tratemos de olvidarnos de todo ésto. Siquiera hasta mañana, porque recordarlo, lo haremos siempre.
Pero ¿ qué pasaba en casa de sus padres?
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