Gerard caminaba a paso ligero seguido por Maurice. Estaba impaciente por encontrarse con su hermano y no veia la hora de llegar frente a su casa. Una vez hubieron salido del corazón de las calles más populosas y céntricas de la ciudad, se encontraron con un camino mitad pedregoso y mitad tierra: habían salido del centro y se encontraban en el suburbio. Un lado y otro del camino estaba salpicado de casitas bajas con sus fachadas de color blanco y sus puertas y ventanas pintadas de azul, otras en rojo, y otras en verde. En todas ellas había pequeños jardines con muchas flores y plantas exóticas, algo en lo que yo no había reparado, pues tal era el enfado que tenía al salir de la vivienda de Niall, que ni siquiera vi ese conglomerado de colores.
Por fin, aparecieron las dos casas unifamiliares adosadas en la que Niall vivía. Maurice le acompañó hasta llegar a la primera planta . Llamó fuerte con los nudillos de la mano, ya que ni siquiera tenía timbre. Desde dentro se escuchó una voz malhumorada que protestaba por lo inadecuado de la hora de visita
- ¿ Quién demonios llama a estas horas ? - respondió el enfadado ocupante de la vivienda
- Soy yo, Maurice, le traigo a un señor que desea verle
- Espera un momento Maurice
Tras unos instantes, abrió la puerta y se econtraron frente a frente Gerard y Niall, que asombrado no podía articular palabra. Maurice dió media vuelta sonriendo y salió de allí, dejando a los dos hermanos a solas. Se miraban fijamente, sin poder pronunciar palabra. Uno no podía dar crédito a lo que veía y el otro en la garganta se agolpaban miles de palabras que pugnaban por salir, sin conseguirlo. Niall inmediatamente supo que Daphne había hablado y por eso la presencia del hermano.
Al fin, los dos avanzaron al frente y se fundieron en un largo abrazo cargado de sentimientos y emociones. Cuando la emoción se relajó, ambos sonrieron felices de estar nuevamente juntos. Niall preguntó por sus padres y Gerard le informó de todo. Pero no le preguntó por mi; era como si quisiera borrarme de su vida. Quiso saber cómo había llegado hasta allí y de que informaciones se valió para conseguirlo
- Sé a qué se debe esta visita: Daphne ¿cierto?
- Si, fue ella la que me dijo que te había visto. Todos te dábamos por muerto o perdido en algún recóndito lugar de la tierra. ¿ Cómo no pensaste en ello?
- ¿ Crees que no lo hice ? Pero todo terminó tan mal, que quise borrarlo de mi cabeza y de mi vida, pero ya ves: aún no lo he conseguido
- ¿ Qué pasa contigo? No tienes espejos en esta casa para que te mires en ellos. Si te hubiera visto por la calle, seguro que pasara de largo sin reconocerte. Con el pelo demasiado largo, una espesa barba, con ropa desaliñada ... y esta casa ¿ cómo has podido llegar a esto ? ¿ Tomas drogas o te emborrachas
-¡ Noooo.! ¿ Cómo puedes pensar eso de mi ? Ni una cosa ni otra
- Pues por las pintas que te gastas, no es de extrañar. ¿Te impulso nuestra pelea a vivir así? ¿ Soy yo el responsable ? Dime
-Nadie es responsable y lo somos todos. No podía imaginar que tuvieras esa clase de interés por Daphne, si lo hubiera sabido jamás habría estado con ella. Te quiero, Gerard, y te respeto. Nunca hubiera imaginado que ambos fuéramos rivales en el amor de una mujer. ¿ Por qué me enamoré de ella ? No lo sé. Esas cosas ocurren, lo que no es tan fácil es que dos hermanos se peleen por la misma chica. Decidí poner tierra de por medio y que ella dirigiese su mirada hacia tí. Pero creo que no lo conseguí
- No, no lo conseguiste por mucho que lo intenté. Me enamoré de ella, creo que al mismo tiempo que tú, pero ella te eligió a ti, y sigue haciéndolo
- ¿ Qué quieres decir ?
- Lo que he dicho. Cuando desapareciste todos andábamos locos porque no sabíamos por donde andabas. Pensamos que estarías en alguna cárcel de algún lugar remoto del mundo. O que habrías muerto o perdido en tu desesperación. Contratamos a alguien que pudiera seguir tus pasos, pero hasta eso resultó fallido. Todos habíamos perdido las esperanzas y fue entonces cuando decidí hablar con Daphne para que fuésemos novios.
Lo intentamos durante una temporada, pero no resultó. Cada vez que me acercaba a ella, se tensaba, si la besaba un latigazo recorría su cuerpo como un escalofrío. Tras un tiempo decidí hablar con ella y conseguir, al menos su amistad.
- ¿ Cómo pudo llegar hasta aquí ? Nunca ha salido de Irlanda
- Querido hermano. Hay un refrán que dice : el hombre propone y Dios dispone... y así ocurrió todo. Muchas veces comentaba que no sabía muy bien porqué había elegido estudiar publicidad, que no tenía especial interés en ello. Pensaba que sería lo más opuesto a ser contable, que era el destino que habían fijado para ella. Y en cuatro años, se convirtió en técnico publicitario. Papa, mama y yo mismo asistimos a su graduación. Estaba feliz, pero ninguno entendíamos muy bien qué era lo que esperaba de esa carrera.
Enseguida encontró trabajo en una importante agencia dedicada a spots y videos publicitarios, Se hizo un hueco por las ideas renovadoras que tenía, y su equipo consiguió una campaña fácil, pero sustanciosa en dinero. Todo estaba dispuesto para el rodaje de los vídeos y las fotos de los spots.
Justo la víspera de comenzar, la modelo que tenían contratada enfermó y hubo de ser ingresada en un hospital y operada de urgencia. El director de la empresa estaba desesperado; habían plazos que cumplir, estudios alquilados y gente contratada que no podían esperar a la recuperación de la modelo. No sé qué argumentos utilizaron, ni qué palabras emplearon, pero el caso es que Daphne haría el papel para los spots. Y por ese trabajo aparte de ascenderla, la dieron una gran suma de dinero. Dinero que empleó en sus primeras vacaciones a un país exótico: Isla Mauricio. Por ella supe que estabas vivo y que aquí vivías. Nunca me ha explicado cómo os encontrasteis y yo lo respeto. Pero sí me dijo que se marchó indignada con tu comportamiento y frivolidad. Tanto es así, que regresó a casa de inmediato. Desde el hotel se puso en contacto conmigo para anunciarme que estabas vivo. Esa noche no pudimos dormir nadie en casa. Papa y mama lloraban aliviados y yo aún no me lo creía. Y en ese momento decidí que tenía que encontrarte y llevarte de nuevo a casa.
- Siento Gerard que hayas tenido que venir tan lejos, pero no voy a volver a casa. No puedo
- Pero ¿ por qué ? ¿ Tienes ataduras aquí ? ¿ Has embarazado a alguna chica ?
- Naturalmente que no. No he sido un santo en todo este tiempo, pero he tenido mucho cuidado en elegir mis compañías femeninas. No, no es eso. Es Daphne. No he conseguido sacarla de mi cabeza. La quiero con más fuerza que antes, y mucho más después de verla. No puedo volver. No estaré en medio vuestro, te doy mi palabra.
- Acabo de decirte que hemos roto, que sólo existe una buena amistad. Es como si fuera mi hermana pequeña. Cierto que la ayudaré siempre que lo necesite, pero confío en que alguna vez encuentre a alguien y vuelva a enamorarme. ¿ Es que no la quieres ya ?
- ¡ Por Dios Santo, Gerard. Te lo acabo de decir. Pero no tengo nada que ofrecer; tengo las manos vacías
- Pues llénalas. Regresa. Continúa tus estudios en donde los dejaste y cuando te hayas reintegrado a la vida que te corresponde, vuelve con ella. Te quiere, Niall. No ha salido con nadie, ni quiere comprometerse con nadie. Pienso que en el fondo espera que vuelvas algún día. Si la amas, regresa y vuelve a ganarla. Yo te ayudaré si es dinero lo que necesitas. ¡ ¡Eres mi hermano! He venido a por ti y aquí estoy esperando que digas que sí, que regresas conmigo.
- No puede ser, no puede ser. No puedo hacerlo. No tengo dinero ni para un billete de autobús ¿ Cómo voy a volver a estudiar y a viajar, sino tengo nada ?
- Cuando éramos pequeños ¿ recuerdas lo que nos juramos ? "Lo tuyo es mio ". Bien pues ha llegado el momento. Además papa tiene dinero de sobra. ¿ Crees que cuando se entere no va a ayudarte? Hazme caso: regresa y retoma tu vida. Créeme harás que todos seamos más felices.
Y siguieron discutiendo, hasta alzando alguna voz. Gerard argumentaba todo cuanto se le venía a la cabeza, pero Niall seguía erre que erre. Veía que se le escapaba entre los dedos y estaba a punto de darse por vencido, cuando Niall dijo:
- Sea. Regresaré contigo. Mirándolo bien, lo que has planteado tiene sentido y es una buena idea. Sólo hay un problema
-¿ Qué problema ? - preguntó Gerard - No creo que sea más dificil que tu localización
-- Terminé mi cuarto año de medicina en Estados Unidos. He de convalidar lo realizado si quiero hacer una especialización
- Muy bien, pues hazlo .
Dudaba y durante un momento paseaba indeciso por la habitación. De pronto se paró frente al hermano y dijo
- De acuerdo. Pero antes quiero pasar por Irlanda y ver a papa y a mama
- Y a Daphne ¿ no ?
- Eso ya lo veremos.
La pesadilla había concluido. Después de aquello, todo sería más sencillo. Aunque surgieran inconvenientes, siempre serían más fáciles de salvar que los que había recorrido hasta ahora.
Por fin, aparecieron las dos casas unifamiliares adosadas en la que Niall vivía. Maurice le acompañó hasta llegar a la primera planta . Llamó fuerte con los nudillos de la mano, ya que ni siquiera tenía timbre. Desde dentro se escuchó una voz malhumorada que protestaba por lo inadecuado de la hora de visita
- ¿ Quién demonios llama a estas horas ? - respondió el enfadado ocupante de la vivienda
- Soy yo, Maurice, le traigo a un señor que desea verle
- Espera un momento Maurice
Tras unos instantes, abrió la puerta y se econtraron frente a frente Gerard y Niall, que asombrado no podía articular palabra. Maurice dió media vuelta sonriendo y salió de allí, dejando a los dos hermanos a solas. Se miraban fijamente, sin poder pronunciar palabra. Uno no podía dar crédito a lo que veía y el otro en la garganta se agolpaban miles de palabras que pugnaban por salir, sin conseguirlo. Niall inmediatamente supo que Daphne había hablado y por eso la presencia del hermano.
Al fin, los dos avanzaron al frente y se fundieron en un largo abrazo cargado de sentimientos y emociones. Cuando la emoción se relajó, ambos sonrieron felices de estar nuevamente juntos. Niall preguntó por sus padres y Gerard le informó de todo. Pero no le preguntó por mi; era como si quisiera borrarme de su vida. Quiso saber cómo había llegado hasta allí y de que informaciones se valió para conseguirlo
- Sé a qué se debe esta visita: Daphne ¿cierto?
- Si, fue ella la que me dijo que te había visto. Todos te dábamos por muerto o perdido en algún recóndito lugar de la tierra. ¿ Cómo no pensaste en ello?
- ¿ Crees que no lo hice ? Pero todo terminó tan mal, que quise borrarlo de mi cabeza y de mi vida, pero ya ves: aún no lo he conseguido
- ¿ Qué pasa contigo? No tienes espejos en esta casa para que te mires en ellos. Si te hubiera visto por la calle, seguro que pasara de largo sin reconocerte. Con el pelo demasiado largo, una espesa barba, con ropa desaliñada ... y esta casa ¿ cómo has podido llegar a esto ? ¿ Tomas drogas o te emborrachas
-¡ Noooo.! ¿ Cómo puedes pensar eso de mi ? Ni una cosa ni otra
- Pues por las pintas que te gastas, no es de extrañar. ¿Te impulso nuestra pelea a vivir así? ¿ Soy yo el responsable ? Dime
-Nadie es responsable y lo somos todos. No podía imaginar que tuvieras esa clase de interés por Daphne, si lo hubiera sabido jamás habría estado con ella. Te quiero, Gerard, y te respeto. Nunca hubiera imaginado que ambos fuéramos rivales en el amor de una mujer. ¿ Por qué me enamoré de ella ? No lo sé. Esas cosas ocurren, lo que no es tan fácil es que dos hermanos se peleen por la misma chica. Decidí poner tierra de por medio y que ella dirigiese su mirada hacia tí. Pero creo que no lo conseguí
- No, no lo conseguiste por mucho que lo intenté. Me enamoré de ella, creo que al mismo tiempo que tú, pero ella te eligió a ti, y sigue haciéndolo
- ¿ Qué quieres decir ?
- Lo que he dicho. Cuando desapareciste todos andábamos locos porque no sabíamos por donde andabas. Pensamos que estarías en alguna cárcel de algún lugar remoto del mundo. O que habrías muerto o perdido en tu desesperación. Contratamos a alguien que pudiera seguir tus pasos, pero hasta eso resultó fallido. Todos habíamos perdido las esperanzas y fue entonces cuando decidí hablar con Daphne para que fuésemos novios.
Lo intentamos durante una temporada, pero no resultó. Cada vez que me acercaba a ella, se tensaba, si la besaba un latigazo recorría su cuerpo como un escalofrío. Tras un tiempo decidí hablar con ella y conseguir, al menos su amistad.
- ¿ Cómo pudo llegar hasta aquí ? Nunca ha salido de Irlanda
- Querido hermano. Hay un refrán que dice : el hombre propone y Dios dispone... y así ocurrió todo. Muchas veces comentaba que no sabía muy bien porqué había elegido estudiar publicidad, que no tenía especial interés en ello. Pensaba que sería lo más opuesto a ser contable, que era el destino que habían fijado para ella. Y en cuatro años, se convirtió en técnico publicitario. Papa, mama y yo mismo asistimos a su graduación. Estaba feliz, pero ninguno entendíamos muy bien qué era lo que esperaba de esa carrera.
Enseguida encontró trabajo en una importante agencia dedicada a spots y videos publicitarios, Se hizo un hueco por las ideas renovadoras que tenía, y su equipo consiguió una campaña fácil, pero sustanciosa en dinero. Todo estaba dispuesto para el rodaje de los vídeos y las fotos de los spots.
Justo la víspera de comenzar, la modelo que tenían contratada enfermó y hubo de ser ingresada en un hospital y operada de urgencia. El director de la empresa estaba desesperado; habían plazos que cumplir, estudios alquilados y gente contratada que no podían esperar a la recuperación de la modelo. No sé qué argumentos utilizaron, ni qué palabras emplearon, pero el caso es que Daphne haría el papel para los spots. Y por ese trabajo aparte de ascenderla, la dieron una gran suma de dinero. Dinero que empleó en sus primeras vacaciones a un país exótico: Isla Mauricio. Por ella supe que estabas vivo y que aquí vivías. Nunca me ha explicado cómo os encontrasteis y yo lo respeto. Pero sí me dijo que se marchó indignada con tu comportamiento y frivolidad. Tanto es así, que regresó a casa de inmediato. Desde el hotel se puso en contacto conmigo para anunciarme que estabas vivo. Esa noche no pudimos dormir nadie en casa. Papa y mama lloraban aliviados y yo aún no me lo creía. Y en ese momento decidí que tenía que encontrarte y llevarte de nuevo a casa.
- Siento Gerard que hayas tenido que venir tan lejos, pero no voy a volver a casa. No puedo
- Pero ¿ por qué ? ¿ Tienes ataduras aquí ? ¿ Has embarazado a alguna chica ?
- Naturalmente que no. No he sido un santo en todo este tiempo, pero he tenido mucho cuidado en elegir mis compañías femeninas. No, no es eso. Es Daphne. No he conseguido sacarla de mi cabeza. La quiero con más fuerza que antes, y mucho más después de verla. No puedo volver. No estaré en medio vuestro, te doy mi palabra.
- Acabo de decirte que hemos roto, que sólo existe una buena amistad. Es como si fuera mi hermana pequeña. Cierto que la ayudaré siempre que lo necesite, pero confío en que alguna vez encuentre a alguien y vuelva a enamorarme. ¿ Es que no la quieres ya ?
- ¡ Por Dios Santo, Gerard. Te lo acabo de decir. Pero no tengo nada que ofrecer; tengo las manos vacías
- Pues llénalas. Regresa. Continúa tus estudios en donde los dejaste y cuando te hayas reintegrado a la vida que te corresponde, vuelve con ella. Te quiere, Niall. No ha salido con nadie, ni quiere comprometerse con nadie. Pienso que en el fondo espera que vuelvas algún día. Si la amas, regresa y vuelve a ganarla. Yo te ayudaré si es dinero lo que necesitas. ¡ ¡Eres mi hermano! He venido a por ti y aquí estoy esperando que digas que sí, que regresas conmigo.
- No puede ser, no puede ser. No puedo hacerlo. No tengo dinero ni para un billete de autobús ¿ Cómo voy a volver a estudiar y a viajar, sino tengo nada ?
- Cuando éramos pequeños ¿ recuerdas lo que nos juramos ? "Lo tuyo es mio ". Bien pues ha llegado el momento. Además papa tiene dinero de sobra. ¿ Crees que cuando se entere no va a ayudarte? Hazme caso: regresa y retoma tu vida. Créeme harás que todos seamos más felices.
Y siguieron discutiendo, hasta alzando alguna voz. Gerard argumentaba todo cuanto se le venía a la cabeza, pero Niall seguía erre que erre. Veía que se le escapaba entre los dedos y estaba a punto de darse por vencido, cuando Niall dijo:
- Sea. Regresaré contigo. Mirándolo bien, lo que has planteado tiene sentido y es una buena idea. Sólo hay un problema
-¿ Qué problema ? - preguntó Gerard - No creo que sea más dificil que tu localización
-- Terminé mi cuarto año de medicina en Estados Unidos. He de convalidar lo realizado si quiero hacer una especialización
- Muy bien, pues hazlo .
Dudaba y durante un momento paseaba indeciso por la habitación. De pronto se paró frente al hermano y dijo
- De acuerdo. Pero antes quiero pasar por Irlanda y ver a papa y a mama
- Y a Daphne ¿ no ?
- Eso ya lo veremos.
La pesadilla había concluido. Después de aquello, todo sería más sencillo. Aunque surgieran inconvenientes, siempre serían más fáciles de salvar que los que había recorrido hasta ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario